Pues, señor, doña Elena Valenciano
resulta que sí está muy preparada
como, de forma un tanto solapada,
asumir dejaba a todo fulano:
es letrada en derecho “cociliano”
(lo cual precisa una animalada
de codos y sales muy preparada),
que es el que se coge con la mano;
además, tiene título “laudano”
en política méntiro-delgada
(que es la que se excreta por el ano);
sin contar con los estudios, paisano,
de los cuales tiene más de una hornada
de carros y carretas, la taimada.
En esto del tituleo sociata
existe bastante uniformidad:
suponen que nuestra credulidad
es tan grande como grande y cegata
es su mucha caradura, ¿verdad?